Lo singular de la sandia
No sólo es uno de los frutos más refrescantes que existen y de menor carga calórica, sino que también posee una gran cantidad de propiedades las cuales son muy beneficiosas para nuestro organismo.
Según los diferentes estudios que se han realizado, esta fruta es perfecta para recuperar las energías, para la salud del corazón, para la pérdida de peso, la visión, la piel y para nuestros riñones, además es ideal para los deportistas. Es por esta razón que se recomienda que la sandía siempre esté presente en la nuestra dieta de cada día.
Además de esto, contiene antioxidantes como los betacarotenos, que se transforma en vitamina A cuando es asimilada por el organismo; licopeno, que protege a las células del daño y se encuentra en el color rojo de esta fruta, y, citrulina que participa en el proceso de obtención de glucosa y energía en el hígado. Estos componentes se incrementan si la sandía está bien madura.
Se consume la pulpa, la cáscara y las semillas. Por cáscara se entiende la que está en contacto con la superficie que es verde y el ½ o 1 cm que le sigue que, en la mayoría de los casos, es descartada por su baja concentración de sabor.
La cáscara de sandía sirve tanto para ayudar a conciliar el sueño y mejorar la calidad
del descanso, pero, al mismo tiempo, aporta energía al organismo. La cáscara, también,
contiene citrulina, un aminoácido muy importante a la hora de mejorar el rendimiento
deportivo y aumentar la resistencia al agotamiento.
Las semillas se pueden utilizar para hacer leche vegetal o para ser tostadas, como snack.