Yogur natural y yogur griego

Procedimiento

Colocar la leche a hervir en una cacerola hasta llegar a 45° (si la tocamos con un dedo limpio, lo deberíamos sentir caliente, pero no nos debería quemar). Colar la leche caliente y agregarle el yogur. Mezclar sin batir para que quede integrado el yogur con la leche. En este punto se le puede agregar miel, frutos secos, azúcar, vainilla… lo que quieran. Yo los prefiero naturales, después le agrego una vez listo y esta opción me permite despues convertirlo en un aderezo para ensalada o en un dip salado.

Tapar la olla, cubrirla con la manta y llevarla a que descanse a un lugar tibio de la cocina o de la casa toda la noche.

Al dia siguiente tenemos un yogur perfecto. Si lo vamos a consumir natural, solo recomiendo envasarlo en botella. Queda semi bebible. En casa separo una botella de bebible y convierto lo que queda en yogur griego

Para el yogur griego:  colocar un colador grande (puede ser el que usamos para la pasta) sobre una olla y cubrirlo con una servilleta o un repasador de tela limpio. Volcar ahí el yogur obtenido y dejar que se filtre tranquilo durante 3 horas en la heladera. Lo que va a pasar es que el yogur natural se va a convertir en un cremoso yogur griego. En la olla va a quedar el suero. Envasar el yogur en frascos limpios y conservarlos en la heladera. Consumir dentro de los 10 días. Pasado ese tiempo, te recomiendo no usarlo fresco sino en recetas que lleven cocción de horno o muchas recetas mas que hago a diario.

Probalo y contame si te resulta esta forma de hacer una olla de yogur y tener dos resultados.

TIP: el yogur griego tiene más proteínas y menos grasas que el yogur natural. Al hacerlo en casa, nos aseguramos cero azúcar.

TIP 2: muchos me han preguntado si se puede hacer con leche cruda. La respuesta es SI, siempre y cuando HIERVAS la leche antes de hacerlo. Primero deberas hervirla, luego bajar su temperatura a 45ºC y desde allí, se agrega el yogur y se continua.